PACO DE LUCIA Y EL PREMIO GRAMMY LATINO

El pasado día 15 de Noviembre le era concedido el premio Grammy Latino en la ciudad estadounidense de Las Vegas, en el estado de Nevada, al maestro de la guitarra flamenca Paco de Lucía. También a otro cantante andaluz David Bisbal. A pesar del bombardeo mediático en los medios genéricos ibéricos por difundir la noticia, había algo “extraño”, ya que con todo lo repetitivo de la misma, solo se publicitaban imágenes del cantante pero no del artista, es decir, estos pulpos mediáticos a los que tanto gustan de transmitir ideología dominante cuando dicen, también la transmiten, a veces, cuando callan. Me explicaré. La noticia envuelta en papel de celofán nos recordaba a los 2 premiados con los Grammy Latinos pero sólo se nos presentaba a efectos visuales a Bisbal en la entrega de los premios, en escenario gigantesco y psicodélico con ingredientes propios  a los que acostumbra el evento en clave MADE IN USA ( vatios, humo, agua, etc..) ,pero en ningún momento la imagen del tocaor de Algeciras apareció en las 625 líneas. ¿No es extraño que no aparezca Paco siendo él uno de los galardonados?  Eso nos preguntábamos algunos.  ¿Cuál será la razón?  Hoy la sabemos. 5 días después del evento conocemos  por qué el maestro de las 6 cuerdas no aparecía en las imágenes televisivas. La razón nos  la acaba de confirmar el propio galardonado con unas declaraciones realizadas en la tarde de ayer Miércoles 20, a las puertas de un teatro suizo momentos antes de iniciar uno de sus conciertos,  declaraciones que no dejan indiferentes a nadie.  “Es un premio al que no le doy ningún valor, es un negocio que ha montado Emilio Stefan” manifestó el maestro de la sonanta, quién no acudió a la gala y en su nombre  lo recibió su hijo Francisco Sánchez Varela, al que según palabras textuales de su propio padre, es decir de Paco de Lucía, la organización del evento “quiso cobrarle 350 dólares”.  O sea, que Emilio Stefan, esposo de la vanagloriada por los pulpos mediáticos ibéricos y miamenses Gloria Stefan y yerno de uno de los más temidos torturadores y asesinos del régimen batistiano en la Cuba pre-revolucionaria, es un estafador, un timador, y sin temor a equivocarnos con la estrecha colaboración de  su esposa, a la sazón ariete de la contra-revolución cubana y también venezolana. ¿Guardará silencio cómplice el amigo y protegido de ambos Alejandrito Sanz, o se atreverá a salir en defensa de su paisano Paco? Con toda seguridad, se hará el distraído, ya que,  no deja de ser un producto de marketing fabricado por los Stefan, sirviendo al paladar musical ( e ideológico ) de la multinacional a la que el matrimonio representa. En esta ocasión el genial guitarrista no se ha manifestado con el arpegio, lo ha hecho de manera clara, concreta, concisa y acusadora con su palabra, rompiéndose, como diría Nietzcher. La influencia en los primeros años de su carrera artística de otro genio, el admirado bailaor y siempre recordado Antonio Gades, mentor y artista comprometido y comunista con el que compartió tramoyas de teatros y consejos militantes en la clandestinidad se ha visto manifestada en esta declaración cargada de rebeldía y dignidad. Posiblemente, a Paco de Lucía las puertas de otros escenarios en el país de las barras y las estrellas se le hayan cerrado a cal y canto pero para el arte flamenco del que es genuino representante se le han abierto de par en par, ya que éste, el flamenco, sigue siendo patrimonio de la izquierda, hoy un poco más escorado aún, después del desprecio de Paco a elementos como los Stefan que sólo rinden pleitesía a la ambición, el engaño y el fraude.   

Desde mi cuarto de cabales…….   ¡Ole, Paco, Ole!